Evaluación Neuropsicológica, punto de partida para el cuidado
Conocer el tipo de demencia con el que vive mi familiar o paciente me permite identificar signos de alerta y cuidar de mejor manera.
¿Qué es una evaluación neuropsicológica?
Existen diferentes procesos o capacidades del cerebro como lo es la atención, memoria, lenguaje, aprendizaje, entre otros. La evaluación neuropsicológica es una herramienta que nos permite conocer y evaluar cómo funciona el cerebro de una persona.
¿Cuándo debe realizarse?
Se recomienda realizar una evaluación cuando hay quejas sobre disminución o cambios en el funcionamiento cognitivo.
En las personas mayores, algunos síntomas de alerta que ameritan una evaluación son los olvidos, problemas para comprender, comunicarse o concentrarse, y dificultad para realizar sus actividades cotidianas.
También se recomienda en quienes cuentan con diagnóstico de demencia y desean incorporarse a algún programa de estimulación o rehabilitación cognitiva.
¿En qué consiste?
Para realizar una evaluación se requiere de la aplicación de pruebas diseñadas para medir los diferentes procesos cognitivos como la atención, memoria, lenguaje, aprendizaje, conducta, etc.
Debido a que se necesita responder a varias pruebas, se requieren de aproximadamente 4 a 5 sesiones para realizar el proceso.
Beneficios
La evaluación neuropsicológica es muy útil, podemos conocer el funcionamiento del cerebro e identificar cuáles son sus fortalezas y déficits. También nos permite generar un diagnóstico, ya que nos ayuda a reconocer los síntomas cognitivos y precisar la enfermedad que podría estarlos ocasionando.
Existen algunas enfermedades que son progresivas, es decir, que avanzan con el tiempo y los síntomas se van modificando. La evaluación nos permite medir estos cambios en el tiempo y establecer líneas de partida en caso de que el paciente vaya a someterse a un tratamiento para poder hacer comparativas posteriormente.
Por último, una evaluación neuropsicológica es útil para diseñar un programa de intervención o tratamiento cognitivo, ya que se requiere conocer al paciente, detectar cuáles son los procesos que necesitan ejercitarse y cuáles habilidades se mantienen preservadas para poder apoyarnos de ellas en la rehabilitación.